Vistas de página en total

lunes, 7 de julio de 2014

Detectives en el siglo de Oro (reseña literaria)

Como he comentado en una entrada anterior, ir a buscar un libro cada día me frustra más porque  da la impresión de que se escribe sobre cuatro cosas, como si no existiese más temas acerca de los que hablar, así que  nada más leer el título de "Ladrones de Tinta" quede prendado por este libro. Un nombre muy sugerente para un libro cuya sinopsis me hice acabar de decantarme por el en su compra.
Ladrones de Tinta no es una novela al uso. Su trama versa sobre como el editor del Quijote manda a un empleado suyo, Isidoro Montemayor a investigar quien se esconde tras Avellanada, el autor de la versión apócrifa de la segunda parte del Quijote. Desde ese momento comienza un juego de pista de estilo detectivesco que nos llevará a movernos por el Madrid de los Austrias con todo lujo de detalles, puesto que Mateo-Sagasta ha sabido reflejar el ambiente de la época, aunque en ciertos momentos, para mi gusto, halla pasajes de corte costumbrista que bajan el ritmo de la lectura, pese a que son de agradecer ya que aclaran el sentir de la época.
Otra de los atractivos de esta novela se halla en que con los personajes con los que se va relacionando nuestro protagonista, no nos resultarán nada desconocido. Desde el mismo Cervantes, al quien encontramos postrado en una cama, amén de conocer detalles menos conocido de su vida, a Lope de Vega, con su altivez y chulería clásica, pasando a otros como Góngora, o al quizás menos conocido Tirso de Molina. 
Una novela apta para todo aquel que ame la literatura, el misterio, y el buen hacer que deja entrever este autor en su obra. Aparte para quienes nos hemos quedado con ganas de más, existe sino llamarla una segunda parte, si otro libro, donde Isidoro de Montemayor, debe de usar sus dotes de investigador en "El Gabinete de las Maravillas". 
Así que si también estás cansado siempre lo mismo, este libro sin duda es el que necesitabas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario